Prof. Juan Camarillo

Qué tal, espero que te encuentres bien, te agradezco la oportunidad de compartirte algo respecto a estas inquietudes aquí expresadas.
Aquí me parece que hay dos temas que son separados, por qué son un asunto propio de cada uno, pero que, evidentemente están trayendo problemas en su relación de pareja.
La historia de vida de cada persona es única, y no representa ningún tipo de valor particular en referencia a los otros, ya que, algo que es de una manera o de una cantidad para uno, puede tener un significado totalmente distinto para otro, por ejemplo, más o menos parejas sexuales pueden representar para una persona una etapa de confusión, para otros de dolor y sentimiento de ser usado, para otros de libertad y para otros de reserva voluntaria, y esto solo tiene un valor subjetivo para la persona que lo vive en relación a su propia historia, pretender que uno vale más que el otro solo es crear paradigmas que en realidad dicen poco o nada de las personas en su individualidad.
Habiendo dicho esto, parece que tu pareja tuviera cierta necesidad o deseo de expresarlo, que él podría cuestionarse en función de si esto le aporta algo valioso a su relación o si no está más bien generando efectos dolorosos para ti, este es el tipo de cosas que necesitan ser tratados como acuerdos de la pareja, es decir, si este tipo de información en este momento de su relación puede tener algún lugar respecto a que sea algo que disfruten ambos y compartan o si por ahora no es así, creo que una opción podría ser preguntarle directamente qué pretende externando esto y si quizá él busque o crea estar viviendo algo agradable con ello y tú le expreses cuál es tu sentir al respecto.
Por otro lado, está el tema de tu inseguridad, que podría estar relacionada por un lado a tu sentir respecto a tu relación de pareja, es decir, a no sentirte feliz y valorada, o por otro respecto a la seguridad de tu valor como persona y como mujer, en donde tengas la sensación de que vales tan poco, que en cualquier momento podrías ser desplazada o reemplaza.
Ninguna de estas tres situaciones son fáciles de discernir y podrían estar ocurriendo simultáneamente por lo cual te aconsejo que busques un espacio donde puedas llevar a cabo una reflexión profunda al respecto, donde el apoyo de un profesional sería de gran ayuda.

Qué tal, entiendo que está es una situación muy angustiante, por qué es probable que haya una sensación de que tu mundo pende de un hilo, te agradezco la oportunidad de responderte, y espero poder aportarte algo, para que empieces a lograr alcanzar cierta tranquilidad.

Hay tres cosas que es bastante importante saber acerca de lo que es una pareja. (A cualquier edad y en cualquier etapa)
1. En la pareja no hay garantías
2. La pareja es algo que, en algún momento inicia y que también en algún momento acaba
3. La pareja es una coincidencia.

Ni la formalidad de presentar a la pareja con la familia en el noviazgo, ni la ostentación de la relación ante la gente o en redes sociales, ni siquiera un evento tan fuerte como el matrimonio, ni tampoco la procreación de hijos, o la adquisición de bienes importantes aseguran nada en una relación de pareja; y esto es muy importante saberlo, por qué, estar en pareja implica los aspectos más importantes e íntimos en la vida de una persona.

Sin embargo las personas somos seres complejos que tenemos una historia propia y que cambiamos, cambiamos a lo largo de nuestras vidas, a veces de manera voluntaria, es decir por qué lo deseamos y nos esforzamos por cambiar, pero también y sobre todo, cambiamos de manera involuntaria, es decir, la vida nos cambia, las experiencias y situaciones que nos acontecen van a veces, de apoco y a veces de un tirón volviéndonos distintos, lo cual también tiene efecto en las relaciones que establecemos, por ejemplo, con el tiempo nos relacionamos de manera diferente con nuestra familia, vamos dejando de tener los mismos círculos sociales, y por supuesto estos cambios también tienen un reflejo en la relación de pareja.

Las parejas inician, pero también acaban, ya sea con el fallecimiento de uno de los miembros al final de un ciclo promedio de vida humana, o ya sea cuando uno o los dos miembros de la pareja cambio de tal manera que, lo que los hacía pareja, dejo de estar presente.
Cuando es así, es importante saber que lo que acaba es la pareja, y no la vida de las personas, y que aún que esto puede ser y seguramente es sumamente doloroso, todavía hay vida por delante seas quien seas, estés en la situación que estés.

Con esto podemos entender que, la pareja es una coincidencia, es un encuentro entre dos individuos en un momento determinando de sus vidas en donde coinciden, primero en alguna atracción mutua, luego en ideas, afinidades, tiempos, intimidades, y luego, quizá, en un proyecto de vida…

Sin embargo aunque en un momento se coincida en todos estos aspectos, los cambios que la vida puede suscitar en ambos miembros de la pareja, puede hacer que esa coincidencia acabe, en algún momento y con ello, la pareja…

Esto es algo que, en un caso como en el que comentas es importante que ambos sepan.

Parece que con la jubilación, acontecieron cambios importantes en la vida de tu pareja, y ahora, el necesita cuestionarse y decidir, si para él la pareja acabó; si para él es así, va necesitar tomar una decisión, por qué cierta intimidad, confianza y convivencia está reservada para la pareja, aún y que todavía no se haya consumado un intercambio sexual, por qué, lo que no sería correcto, ni justo para ti, sería que él pretenda vivir todas esas cosas enriquecedoras que se disfrutan junto a una pareja con otra persona, y a ti dejarte con las cargas y responsabilidades que también son parte de una pareja, el necesitará reflexionar con quien desea en este momento de su vida hacer pareja y ubicar toda la experiencia de la pareja con una sola persona y no pretender usarlas a ambas de la manera que sea más beneficiosa y cómoda para él como si fueran objetos; tal vez, y solo tal vez, luego de esa reflexión, resulte que no esté tan seguro de ese cambio y en ese caso, sería necesario que ambos hablarán para conocer las necesidades de cada uno y lo que creen que les haga falta para, digamos, reconstruir esa coincidencia y volver a ser una pareja plenamente.

Por tu parte, necesitarás asumir que existe la posibilidad de que, aun y que para ti no sea así, puede ser que para la persona con quien construiste un proyecto de vida, esa situación ya haya acabado, y que, si ese es el caso, no es el fin de tu vida, necesitarás hacer un duelo por la relación perdida, pero recordando, que aún eres madre, amiga, quizá hermana, hija, entre otras cosas, pero sobre todo, mujer y que mientras sigas teniendo vida, aún hay muchas cosas, situaciones y relaciones que puedes vivir, formar y disfrutar para ser feliz.
Si sientes que te cuesta demasiado ver todas estas posibilidades, quizá haga falta que te hagas acompañar por un profesional que te dé la ayuda que necesitas para llevar acabo este difícil pero necesario y sobre todo posible proceso.