Dra. Claudia Patricia Carvallo Guevara

Esofagitis por reflujo

La esofagitis se refiere a una inflamación del esófago en respuesta a estímulos agresivos. El reflujo gastroesofágico consiste en el paso del contenido ácido del estómago al esófago, el cual no tiene las barreras naturales para defenderse del mismo. Los grados de esofagitis son variables, desde la formación de pequeñas heridas o erosiones, hasta la aparición de úlceras o estrechez de la luz esofágica. El tratamiento inicial es a base de medicamentos que disminuyen la acidez, en general medicamentos de la familia del Omeprazol, que va de la mano estrechamente con la dieta evitando alimentos que causan reflujo. Si no hay respuesta, se sugiere realizar una revisión endoscópica.

Colecistitis aguda

La colecistitis aguda es la inflamación de la vesícula biliar, en su gran mayoría por la presencia de cálculos. Puede presentarse con uno o varios episodios de dolor abdominal, generalmente tras una comida de alimentos grasos o abundante, con náuseas y vómitos que mejoran parcialmente el dolor. La colecistectomía es la cirugía de elección, siendo en la actualidad la laparoscopía el abordaje indicado por ofrecer una recuperación más rápida, un mejor aspecto estético al evitar una herida de gran tamaño y una alta tasa de éxito.

Cálculos biliares

La litiasis biliar es la presencia de cálculos o piedras en la vesícula biliar. Son de tamaño variable, desde unos cuantos milímetros hasta de varios centímetros. Se forman por acumulación de algunas partículas de la bilis, siendo los de colesterol los más comúnes. Pueden ser asintomáticos o causar dolor que se localiza en la boca del estómago o en el abdomen superior derecho, vómitos, fiebre, coloración amarillenta de la piel (si los cálculos obstruyen el flujo de la bilis), orina oscura (coluria) o heces blancas (acolia). El tratamiento es la cirugía en los casos sintomáticos, mientras que los que no dan síntomas y no causan complicaciones, requieren vigilancia periódica.

Apendicitis

La apendicitis aguda consiste en la inflamación del apéndice cecal, el cual es un pequeño vestigio que se encuentra localizado en el colon del lado derecho. Su luz es estrecha por lo que puede obstruirse internamente con materia fecal o externamente por compresión ganglionar, sobretodo en edades tempranas. La inflamación tras la obstrucción es progresiva, lo cual produce dolor que inicia en la boca del estómago y se traslada al abdomen bajo del lado derecho, con náuseas, vómitos y fiebre en casos complicados. El tratamiento es la cirugía inmediata, la cual puede ser abierta (herida media o lateral) o laparoscópica (incisiones pequeñas).

Angiodisplasia del colon

Las angiodisplasias son pequeñas arañas vasculares que aparecen en el tubo digestivo. Son superficiales y frágiels por lo al romperse, sangran en mayor o menor grado. Pueden ser únicas o múltiples. Su aparición es espontánea aunque la edad es un factor predisponente así como algunas enfermedades agregadas como la enfermedad renal crónica. Los trastornos de la coagulación o de la función plaquetaria pueden hacer que el sangrado sea aún mayor. El tratamiento de elección es la cauterización por endoscopía, la cual controla la hemorragia de manera efectiva.