Le conté a mi mamá sobre mi ansiedad y solo se rio de eso y la verdad es algo que me duele mucho y n

Chale, lo lamento mucho, y que justo cuando hiciste el esfuerzo de compartir algo tan importante y vulnerable como tu ansiedad.
Es muy común que, cuando las personas no entienden lo que es la ansiedad, la minimicen o se rían por ignorancia, incomodidad y creyendo que lo que tú vives no tendría por qué hacerte sentir ansiedad.
Si algo puedo decirte es que la ansiedad no es una broma, no es una elección, y no es algo que puedas controlar solo con "echarle ganas". Es una condición de salud mental legítima que requiere ayuda y apoyo profesional.

La buena noticia es que ya has decidido buscar ayuda, ahora solo necesitas encontrar las puertas correctas. Existen líneas de apoyo gratuitas, checa si en tu ciudad el 911 tiene opción de salud mental. O solo Googlea "linea de crisis emocional" y explora las opciones.

Existen servicios de Salud Pública o Centros Comunitarios. Si de plano no puedes costear un terapeuta privado, busca en tu municipio o alcaldía un Centro de Salud Mental o un centro comunitario. Estos lugares suelen tener servicios de psicología o psiquiatría a bajo costo o gratuitos.

No dejes que una mala experiencia te detenga. Eres valiente por reconocer que necesitas ayuda. Si quieres que te acompañe en este primer paso acudiendo con terapeuta, estoy aquí para apoyarte.

Lamento mucho leer esto. Debe de ser duro el acercarnos a una persona importante y recibir esta respuesta. La psicoterapia es un espacio donde puedes buscar ayuda para aprender a relacionarte de una manera distinta con la ansiedad.

Gracias por escribir. La experiencia que usted describió con su madre se conoce como desautorización (ridiculización) y sólo hace que el paciente se sienta peor. Lo que más ayuda, precisamente, es lo contario: la validación. Cualquier persona puede sufrir de ansiedad sin que ello la haga culpable de algo. La ansiedad surge casi siempre debida a experiencias adversas de la infancia y requiere tratamiento en Psicotraumatología.

Hola buen día. Te entiendo, todavía existen algunas personitas que no logran comprender y ser empáticas con el dolor psiquico o sufrimiento emocional, es decir, la salud mental aún no la identifican. Si así lo requieres, estoy a tus ordenes, puedes agendar en línea o de manera precencial, saludos.

Hola, a quien corresponda. Lamento que hayas vivido esa experiencia. Cuando una figura cercana minimiza lo que sentimos, el dolor suele aumentar. La ansiedad es real y merece atención, aunque otros no la comprendan. Buscar ayuda profesional es un paso valiente y válido. En un espacio terapéutico puedes encontrar contención, comprensión y herramientas para manejar lo que estás viviendo, sin juicio. Así Orientación Yam

Hola! El mayor detonador de la ansiedad son los pensamientos incontrolados sobre situaciones que dan miedo y te angustian. De preferencia acude a terapia psicológica, y si no, trata de pensar en algo que te agrade mucho, eso y una respiración profunda durante varios minutos puede ayudarte a controlar tu ansiedad.

Siento mucho que hayas pasado por eso; que minimicen tu ansiedad duele y puede hacerte sentir sola. Tu malestar es real y merece ser tomado en serio. Buscar ayuda con un profesional de la salud mental puede darte el apoyo y la contención que ahora necesitás. No tenés que atravesarlo sola.

Lamento que hayas vivido esa experiencia. Cuando una persona se atreve a hablar de su ansiedad y recibe burla o minimización, el dolor suele ser doble: por lo que se está sintiendo y por no haber sido comprendida. Es importante decirlo con claridad: no todas las personas tienen la sensibilidad ni la información necesaria para entender lo que implica vivir con ansiedad, incluso cuando se trata de alguien cercano como una madre.
Dicho esto, hay algo fundamental que conviene tener en cuenta: lo más importante no es que los demás comprendan lo que te pasa, sino que tú puedas comprenderlo y atenderlo de la mejor manera posible. Buscar ayuda es un acto de cuidado, no de debilidad.
La ansiedad no es únicamente un tema psicológico. Es una condición compleja que involucra múltiples dimensiones de la salud. Para abordarla de forma adecuada, es necesario revisar:
La salud física, como la alimentación, la calidad del sueño, el nivel de actividad física y el manejo del cansancio.
Aspectos biológicos y hormonales, que pueden influir directamente en el sistema nervioso.
La organización mental y emocional, es decir, cómo piensas, cómo interpretas lo que te ocurre y cómo gestionas tus emociones.
Solo cuando se observa el contexto completo es posible definir el camino más adecuado para el tratamiento psicológico y emocional de la ansiedad.
A nivel social, este padecimiento sigue estando rodeado de muchos estigmas. Es común escuchar frases como: “Pero si lo tienes todo, ¿de qué te preocupas?” o “¿Ansiedad de qué, si tienes motivos para ser feliz?”. Estas respuestas parten de una falta de comprensión: la ansiedad no es una elección ni una exageración, y muchas veces existe un desorden fisiológico real que necesita ser reorganizado, no solo a nivel químico, sino también en la forma en que la persona se relaciona consigo misma y con su entorno.
Abordar la ansiedad implica también iniciar un proceso de autodescubrimiento, algo para lo que la mayoría de las personas nunca fue educada. Conocerse, entender cómo funcionas, revisar tus relaciones y aprender a cuidarte emocionalmente es parte del camino terapéutico.
Este proceso suele incluir revisar las principales esferas de la vida:
la relación contigo mismo/a.
la pareja
la familia
el trabajo
la salud
la vida social
Poco a poco, se trata de tomar conciencia y responsabilidad sobre cada una de ellas, empezando por la más importante: la relación que tienes contigo.
Si sientes que no encuentras comprensión en tu entorno cercano, buscar acompañamiento profesional puede ser un primer paso fundamental. La ansiedad es tratable, y no tienes que atravesar este proceso en soledad.