¿Es normal que al tocar el clitoris con los dedos no sienta estimulación y no pueda llegar al orgasmo?

Buen día. Te sugiero acudir con un sexólogo para determinar algún posible trastorno psicológico.
Saludos cordiales y muchas gracias por su confianza.

Buen día, así es, se tiene que descartar todo, acude al sexólogo te podría orientar de ir al ginecólogo o psicólogo, ellos podrán ayudarte en tu problema. Saludos

La sensibilidad varia de una persona a otra en tu caso es normal que experimentes ese tipo de sensaciones, la supervición de tu ginecólogo y el apoyo terapéutico ayudarían a aclarar el porque no reaccionas con la misma sensibilidad en el caso que refieres.

Hola, buen día.
El clítoris tiene muchas terminaciones nerviosas lo que lo hace muy sensible, no obstante es normal que unas formas de tocarlo sean más satisfactorias que otras. Por otro lado, con mucha frecuencia por la falta de educación sexual y los mensajes en contra de nuestra sexualidad a veces cargamos bloqueos que no nos permiten gozar plenamente la sexualidad. Te recomiendo que acudas con un sexólogo/a para que puedas explorar tu situación particular y puedas sentirte mejor y disfrutar más.
Saludos cordiales y muchas gracias por su confianza.

Así es muñeca, el clítoris como es de las zonas más sensibles del cuerpo femenino, puede ser que se inhiba con un toque no tan delicado. Intenta hacerlo muy leve y suave al inicio, conforme vayas practicando de repente observaras cómo es mejor para ti. Cualquier duda, puedes acercarte con un especialista en sexualidad humana y con gusto te apoyamos. Excelente tarde.
Marlem

Te pasa que empiezas a desarrollar un fetiche por masturbarse con almohedas aparentemente, lo cual no es malo

Hola! me parece importante investigar si quizá no hay una resistencia o represión por el hecho de masturbarte y que quizá te hayan impuesto a que eso es algo impuro o algo mal visto y eso sea lo que no te hace disfrutar cuando lo haces hacia ti misma y por eso recurras a usar algo más.

La erotización en general de nuestro cuerpo y de nuestros genitales, en cada persona tiene distintas características. La forma en que responde nuestro cuerpo sexualmente varía de acuerdo a aspectos fisiológicos y psicológicos, a partir de nuestra genética, experiencias y aprendizaje. Algunas mujeres expresan mayor sensación erógena que otras en partes específicas del cuerpo como el pecho y los pezones, las nalgas, el perineo y el ano, el clítoris la vulva y la vagina propiamente. Del mismo modo, respuestas distintas ante distintos tipos de estímulos, de acuerdo a su origen e intensidad. Es importante que te permitas conocer tu propio cuerpo y las respuestas erógenas o sexuales que tiene ante distintos estímulos y circunstancias. En este caso no es propiamente una situación anormal sino una forma específica en la que responde tu cuerpo. Tú puedes modificarla si le enseñas a tu cuerpo a responder a distintos estímulos sexuales. Sin embargo es importante identificar que cada cuerpo y cada persona tiene distintos niveles y formas de experimentar sensaciones erógenas y placer sexual.

Sí, es totalmente normal que algunas personas no sientan placer o no lleguen al orgasmo al tocar directamente el clítoris con los dedos, pero sí lo logren a través de roces indirectos como con una almohada. Cada cuerpo es único y la forma de experimentar placer varía mucho.

Lo que describes puede deberse a la hipersensibilidad del glande del clítoris (la parte externa visible), lo cual puede hacer que el contacto directo sea demasiado intenso o incluso incómodo. En cambio, el roce suave, difuso y sin presión directa, como con una almohada, permite una estimulación más placentera y tolerable para tu sistema sensorial.

Qué puedes hacer: Explora con autoestimulación indirecta usando presión externa suave o movimientos rítmicos que no toquen directamente el clítoris, y date permiso para conocerte sin expectativa.

Lo que te da placer es válido y no tiene que seguir ninguna regla.
Te invito a tomar terapia conmigo, donde puedes descubrir, sin juicio, tu sexualidad de forma respetuosa y libre, aprendiendo a conectar con tu cuerpo con aceptación, placer y paz.