Dr. Giovvani Alejandro Cervantes Ramos

Cirrosis o hepatitis alcohólica

La cirrosis es una enfermedad que se desarrolla a consecuencia de múltiples causas siendo la más conocida el consumo de alcohol, infecciones virales como hepatitis C o B, enfermedades autoinmunes como colangitis esclerosante primaria, colangitis biliar primaria (antes cirrosis biliar primaria), hepatitis autoinmune. Para fines prácticos es un aumento de la dureza hepática (fibrosis) que trae consigo una disfunción paulatina del hígado y se manifiesta por diversas complicaciones tales como color amarillo en la piel (ictericia), formación de agua abdominal (ascitis), formación de várices en esófago y estómago que traen consigo sangrado y encefalopatía hepática.

Colitis ulcerosa

La colitis ulcerosa es parte de un grupo de patologías que se llevan por nombre enfermedad inflamatoria intestinal contando con 3 variantes la enfermedad de Crohn, colitis indeterminada y la colitis ulcerosa. Teniendo que está última es la más frecuente en la población Latina, manifestándose con evacuaciones con sangre, dolor abdominal, pérdida de peso, fiebre, dolor en articulaciones, lesiones en la boca. Para lograr el diagnóstico es necesario conjuntar criterios clínicos, radiológicos, endoscópicos y de laboratorio.

Gastritis

La gastritis puede ser una causa de dolor o ardor en la parte alta del abdomen (dispepsia), teniendo otras posibles manifestaciones tales como sensación de llenura o inflamación mediata después de comer. Las causas principales de la inflamación de la mucosa del estómago son: infección por Helicobacter Pylori, consumo de analgésicos (Diclofenaco, naproxeno, piroxicam, ketorolaco, indometacina, aspirina), retorno de la bilis al estómago. Para su diagnóstico se requiere la realización de un estudio de endoscopia, mediante el cuál se valoraran todas las paredes del estómago y de ser necesario según los hallazgos se tomaran biopsias de las mismas.

Síndrome del colon irritable (IBS)

El síndrome de intestino irritable (colitis nerviosa) es parte de un grupo de patologías que se denominan como trastornos funcionales digestivos, hasta el momento no conocemos la causa precisa que lleva a un paciente a desarrollar está enfermedad, sin embargo, son una de las causas más frecuentes de visita al médico especialista en tubo digestivo. El diagnóstico se logra mediante la implementación de unos criterios que llevan por nombre Roma, siendo la última actualización los criterios de Roma IV. El manejo conlleva el uso de un sin de fármacos, debido a las diferentes características sintomáticas que puede manifestar un paciente.