Emmanuel Velásquez Luna

Trastorno de hiperactividad y déficit de atención (TDAH)

Los tiempos actuales llevan a los niños a un abandono paterno, aunado a alteraciones biológicas, llevan a esta posición llamada TDAH. Sin embargo, el niño entre tanto movimiento corporal, tiene muchas cosas que decir: reclamos, afectos, emociones, que no pueden decir de otra forma. Ese deseo que el niño expresa con falta de atención o hiperactividad, debe ser escuchada. El psicoanálisis apuesta a la libre expresión del niño, al libre juego y posteriormente a la instauración de una ley que le permita acceder a sus deseos, sobre todo expresarlos por la palabra. A diferencia de otros tratamientos, no se busca el entrenamiento, ni la medicación, sino su humanización.

Duelo

Amar a una persona, animal, objeto u trabajo y perderle (muerte, abandono, ruptura, etc.) resulta uno de los hechos más hirientes para la vida psíquica. Aquello perdido se lleva algo, que se cree es real. El trabajo, lejos de dejar de hablar de ello, es todo lo contrario, hablar mucho más y darle un sentido, una interpretación y un quehacer. Los procesos de duelo, pueden ser cortos o largos, dependiendo de la representación de lo perdido para el paciente, pero siempre habrá una posibilidad de hablar de eso "que se fue".

Anorexia nerviosa

El cuerpo expresa lo que la palabra calla. En la anorexia puede existir algún elemento que lástima profundamente al paciente, que no puede aceptar su cuerpo tal y como es, exteriorizando con una baja notable de peso, purgas y alteraciones en la percepción. El psicoanálisis permite que el paciente pueda hablar de aquello que no le permite ver su propia composición corporal, poniendo un límite a los imperativos inconscientes que le obligan a ser "perfecta", llegando a la aceptación de su propio goce.

Trastorno obsesivo compulsivo (TOC)

La neurosis obsesiva y sus compulsiones, fueron estudiadas por Freud y Lacan. Los pacientes se ven confrontados por representaciones que no permiten tomar una decisión, por el temor a fallar o al castigo punitivo. Esta representación fue creada en los primeros años de la infancia y el paciente a través de sus propios recuerdos irá descubriendo que es aquello que le produce su padecimiento, resolviéndolo. ¿Quién es aquel que castiga por fallar? Eso es algo que en el psicoanálisis se busca descubrir a profundidad.