Lic. Ana Galindo Zavala

en la etapa de los 5 años, los niños comienzan a tener curiosidad natural por su cuerpo y por las diferencias entre ellos y los demás. Esta curiosidad es parte del desarrollo, pero lo que describes va más allá de una simple exploración inocente, sobre todo por el lenguaje utilizado (“que le tocará ahí”) y el contexto (en un juego virtual, dirigido a otro jugador).
Aquí algunos puntos clave:
1. No necesariamente indica abuso, pero sí requiere atención. Aunque este tipo de comportamiento no significa automáticamente que haya ocurrido abuso, sí puede ser un indicio de exposición a contenidos o dinámicas inadecuadas para su edad.
2. Los juegos virtuales o programas pueden exponerlos a interacciones no reguladas. Incluso con filtros parentales, algunos juegos o programas en línea permiten interacción con otros jugadores que pueden tener comportamientos inapropiados o incluso peligrosos.
3. La respuesta “no sé” es común a esa edad. Por falta de comprensión, por miedo a ser reprendía o no saber explicar.
¿Qué hacer?

Mantén la calma y evita mostrar enojo o vergüenza
Revisa todo el contenido digital que usa
Observa si hay cambios en su comportamiento
Refuerza el concepto de privacidad y autocuidado
Considera una evaluación psicológica
No como algo alarmante, sino como un acompañamiento preventivo. Un psicólogo infantil puede evaluar si este comportamiento es parte del desarrollo o si hay señales que requieren intervención.

Frase útil para decirle a tu hija:
“Tu cuerpo es tuyo, y nadie debe tocarlo sin tu permiso. En los juegos y en la vida real, cuidamos nuestro cuerpo y respetamos el de los demás. Si algo te hace sentir rara o confundida, puedes contarme siempre. Yo estoy aquí para protegerte.”