el medicamento frisium te vuelve adicto a tomarlo?

Las benzodiacepinas como el frisium tienen un potencial adictivo. Sin embargo para poder hablar de una adicción se requiere de un consumo prolongado (más de doce meses), fuera de indicación y una adaptación biológica, psicológica y social para el consumo de la sustancia, es decir, la persona transforma su vida laboral, social, académica, familiar por y para el consumo de la sustancia, además tiene un consumo desmedido y a pesar de ser conciente de las consecuencias que este genera. Las consecuencias biológicas es la tolerancia, una necesidad de aumentar la dosis porque las dosis habituales no hacen efecto; abstinencia (un síndrome por la retirada de este fármaco) y craving (deseo persistente e irreflenable para consumir la sustancia). Para que todo esto suceda se requiere de varios factores, por lo que si usted toma el medicamento bajo prescripción y supervisión y se lleva por tiempos cortos, no tendrá problemas en torno a la adicción.